Como academia especializada en cursos de inglés para empresas hemos constatado que la internacionalización es la cuenta pendiente de la mayor parte de las organizaciones que desarrollan su labor en territorio nacional. Las empresas quieren vender más, abrirse a nuevos mercados y ser competitivas y eso es imposible sin el conocimiento de idiomas. Hoy en día es casi obligado que los directivos, los altos ejecutivos y los empleados sepan como mínimo, inglés (lengua franca a la hora de establecer negocios internacionales).
Básicamente, se trata de adquirir e interiorizar la mentalidad internacional y estar cómodo forjando relaciones comerciales en todos los mercados. Así, aumenta exponencialmente la posibilidad de incrementar los beneficios empresariales. La realidad es que las corporaciones que han implementado estrategias de internacionalización han resistido mejor la coyuntura económica de los últimos años.
A juicio de la profesora Tsedal Neeley, integrante del equipo docente de Harvard Business School son tres los motivos fundamentales que debe tener en cuenta una empresa a la hora de obtener un nivel aceptable de inglés que le permita negociar de forma exitosa. En primer lugar, se encuentra la presión competitiva, que obliga a utilizar todas las herramientas al alcance de las organizaciones para crecer y prosperar. Por otra parte, la profesora cita la globalización de tareas y recursos, que ha provocado la dispersión de los trabajadores en distintos puntos geográficos para trabajar en pro de un objetivo común. Finalmente, los matices que afectan a las fusiones y adquisiciones internacionales constituyen la clave a la hora de cerrar o no un acuerdo, por lo que saber desenvolverse en un inglés empresarial óptimo resulta básico.
¿Cuáles son las claves para aprender inglés empresarial?
Los expertos en inglés para profesionales lo tienen claro: hay que centrarse en los aspectos prácticos del idioma y poner a los alumnos en situaciones similares a las que se encontrarán en la realidad. En lo que respecta a los cursos de inglés para empresas, la idea es adaptar el temario al sector de actividad y enfocar la enseñanza hacia los objetivos de la empresa: acceder a nuevos mercados, conseguir socios, atraer a distribuidores, cerrar acuerdos de negociación con proveedores etc.
Como veis, aprender inglés empresarial resulta tan importante para el profesional que quiere acceder a nuevas oportunidades profesionales como para el empresario que desea obtener beneficios empresariales en un mercado cada vez más competitivo.
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